Ordutegiak/horarios

• Irteerako ordua: 8:00                                   Igandean 2015-11-22
• Lekua: Caja Laboral (J.B.Uriarte)
  • Prezioak     AUTOBUSA: Bazkidea/Socio : 7€         Ez bazkidea/No Socios: 10€

• Galdakaora heldu: 19:00

(Autobuseak ordaintzeagatik 1€ gehiago kobratuko da /Los que paguen en el autobús tendrán un incremento de 1€)

 Azalpen orokorra / Descripción general.

GR-229 Mikeldi, Durangaldea ezagutzeko ibilbide zoragarria. Durangaldea auzoz auzo eta urratsez urrats sakonki ezagutuko dugu, Euskal Herriko toki ederrenetarioak, mendiak, dorreak, harrizko baserri erraldoiak, iturriak, dorretxeak, herriguneak, baselizak, auzo magikoak, mendiak, haitzak, Urkiolako Natur Parkea, Anboto eta Oiz mendien magalak, errotak, garaixeak, burdinolak, besteak beste topatuko ditugu GR-Mikeldik proposatzen dituen 5 ibilbideetan, baina aurten guk 2 egingo ditugu. Bizkaitar nekazaritza eta abeltzaitzaren bihotzean barneratuko gara.

Durangaldea, eskualde magikoa eta ezezaguna. Berturatu eta ezagutu. Liluratuko zaitu.

IBILBIDEA/ITINERARIO

2ª etapa: Miotako gana – Garai :19,4 kms, 6 horas, fácil.

Miotako gana (220 m.) – Leiz (320 m.) – Murgoitio (300 m.) – Berriz- San Migel Zaldibar (200 m. )- Goierri (320m.)- Zengotita (400 m.)- San Cristóbal (500 m.) – Andikoa Berriz (300 m.) – Garai (350 m.)

Continuaremos el recorrido partiendo de Miotako gana (220 m.), siguiendo la carretera de Elorrio a Berriz y tras cruzarla, nos dirigiremos al barrio de Leiz. Junto a la ermita de San Lorenzo su fuente y sus mesas nos tentarán para detenernos a tomar allí un tentempié.

Del barrio de Leiz parte una derivación del camino que nos conducirá a dos de los puntos más bellos de Elorrio: el barrio de Zenita y la necrópolis paleo-cristiana de Argiñeta con sus estelas y sepulcros en piedra s.IX.

Volviendo a Leiz, a partir de este punto, el camino en suave descenso nos llevará a Berriz, no sin antes detenernos en la ermita de San Juan del barrio de Murgoitio, desde donde admiraremos el impresionante paisaje de las peñas de Durangaldea. En el barrio de Miota y cercano al recorrido, su ermita atesora una pequeña necrópolis y una puerta policromada. Siguiendo la calzada, en un momento nos encontraremos en el centro del municipio de Berriz. Continuamos junto a la vía de tren, a mano derecha según subimos la cuesta de la calle Iturriza, donde podemos admirar el Palacio de la Marquesa, sede hoy del ayuntamiento de Berriz. Bordearemos Berriz por un sendero arbolado, que bordeamos junto al río. Cuando llegamos al cementerio tomaremos la antigua calzada, que se encuentra en perfecto estado de conservación, hasta llegar al barrio de Olabe, donde disfrutaremos de bucólicas vistas de prados y caseríos. Desde aquí, siguiendo las señales llegaremos al núcleo urbano de Zaldibar. Ene l descenso nos encontraremos con la ermita de San Miguel.

Atravesaremos Zaldibar. A la altura de la Casa Torre de Garitaonaindia, junto al polígono industrial Ibur Erreka de Zaldibar, tomaremos un sendero que nos llevará hasta la ermita de Santa Marina donde atravesamos la N-634 por un paso elevado para dirigirnos al barrio de Zengotita en tierras de Mallabia. Poco antes, en el barrio de Aretxu podemos tomar la derivación de Mallabia. Desde Zengotita disfrutaremos de las vistas del valle de Mallabia a nuestros pies.

Este recorrido está lleno de riachuelos y fuentes que brotan de estás húmedas tierras. Esta zona de la comarca de Durangaldea estuvo en épocas pasadas llena de molinos y ferrías y pequeñas centrales eléctricas impulsados por la fuerza de los riachuelos que descendían del monte Oiz.

Desde este punto en el barrio de Zengotita, comenzaremos la subida a la ermita de San Cristóbal Txiki que marca el comienzo del descenso hasta Andikoa, hermoso barrio de Berriz, presidido por el Santuario de la Virgen de Andikoa.

A partir de aquí, una pequeña carretera en zigzag y descendente que atraviesa el barrio de Sarria entre hermosos caseríos centenarios, ríos, saltos de agua, molinos, y pequeñas centrales eléctricas para llegar hasta Garai, con el murmullo del agua pegado a nuestros oídos.