Decada 50- Iniciacion a la escalada

La atracción por otros aspectos de la montaña hace que aproximadamente desde 1953 varios componentes del Ganguren empiecen a practicar la escalada, iniciándose en las paredes de Atxarte, las Atxas o Torrestegi. Entre ellos encontramos socios citados con frecuencia en actividades relevantes del club, como Josu Altuna, Ignacio Ealo, Maritxu Bilbao o Felix Sierra, pero también aparecen nombres nuevos: Justo Estrada, Justo Eriz, José Mari Canales y José Luis Urizar.

El 12 de Octubre de 1955 tres de estos escaladores, Josu Altuna, Ignacio Ealo y Maritxu Bilbao logran escalar el Atxa Adarra, situado en las Peñas de Urigoiti (Gorbea), por la cara este, vía no utilizada hasta entonces. En la cima depositaron un libro de firmas con la inscripción:

"Para llegar a las alturas hay que renunciar a la propia vida y confiar en Dios. (Jacinto Ventura)

A los escaladores ARAMUAK del Grupo Alpino Ganguren, de Galdácano, les cabe el honor de poner este libro a disposición de cuantos montañeros tengan la suerte de llegar a esta cumbre del Atxa Adarra de 1020 metros, para que puedan estampar sus firmas que pasarán a la posteridad; 12 de Octubre de 1955."

A pesar de esta y otras proezas, todo aquello novedoso y desconocido, produce la incomprensión inicial de la gente. Quizá por esa razón, el hacer escalada era un tema "tabú", tanto en el club como en casa. Esto se traducía en que el grupo debía correr con todos los gastos del material necesario, sin ayuda alguna por parte de la directiva y guardándolo casi a escondidas en la barbería de Josu Altuna.

La situación hizo crisis en 1957, cuando practicando en las Atxas, Jose Mari Canales y Jose Luis Urizar sufren un trágico accidente. El hecho causó gran conmoción a nivel del club y del pueblo de Galdakao, e incluso alguno de sus compañeros, como Josu Altuna, abandonará la escalada en consideración a ellos. Durante mucho tiempo las opiniones estuvieron divididas y sólo años después, al generalizarse este deporte, cambiará la mentalidad de los socios.

El 13 de Octubre de 1957 se realiza una salida, con misa memorial celebrada por el padre Santiago Ibarzabal del barrio de Rekalde, a las Atxas, donde se colocó una placa en recuerdo a los escaladores desaparecidos.

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