Antecedentes 1927-1942
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Si de contar la vida del Grupo Alpino Ganguren se trata, hemos de ver más allá de su fundación a la hora de nombrar sus orígenes, y delimitar el contexto deportivo, social y político en el que surge ya a principios de siglo, el número de practicantes del montañismo en el País Vasco había dado lugar a la creación de secciones de montaña en sociedades deportivas y en ciertos casos, a clubes montañeros independientes.En esas primeras décadas surgieron los concursos de 15 y 100 montes, punto en el que de alguna forma se unían las diversas maneras de entender la practica montañera. Pero no era suficiente una actividad común, hacía falta una entidad que encauzase los esfuerzos de las numerosas sociedades y así estos propósitos desembocan el 18 de mayo de 1924 en la fundación de la Federación Vasco-Navarra de Alpinismo en Elgeta (Gipuzkoa). |
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A la par de estos acontecimientos, en 1927, aparece en un listado de la revista Pyrenaica como federada, la agrupación "Club Elexalde, Galdácano". En realidad, lo que marca es la creación de una sección de montaña dentro de la sociedad deportiva, que había nacido con el fútbol como actividad principal. También estaba incluido el atletismo, traído a Galdakao en aquellos años por Alberto Duñabeitia Mota, ingeniero químico de la empresa "Sociedad Española de la Dinamita ", que fue jugador del C.D. Español de Barcelona, ciudad en la que realizó sus estudios universitarios, pasando posteriormente a jugar en el Athletic de Bilbao, formando parte del equipo que consiguió el título de liga en 1923. Es así mismo padre del que fuera presidente del Athletic, Beti Duñabeitia. |
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Según relataba Josu Altuna en sus escritos, no era un grupo muy numeroso pero si entusiasta, puesto que en el año de su creación y en el siguiente se celebraron concursos de montes en Galdakao. Concursan en el recorrido de montañas de 1927 los Sres: Vicente Pérez, José Ealo, Pablo Otxoa, Rufino Otxoa, Raimundo ¡barra, Lorenzo ¡barra, Pedro Salvador y Martín Mandaluniz. La primera entrega de premios se produce, en concreto, el I 31 de Julio de 1929 en la campa de Santa Bárbara y en las personas de Kepa San Salvador, su hijo Ricardo San Salvador, José Ealo y el propio Josu Altuna. |
A principios de 1930 la dictadura de Primo de Rivera tocó a su fin y la política vuelve a resurgir. Se esperan elecciones y muchos mendigoizales engrosan las filas de los partidos políticos, abandonando muchos de ellos, no sus excursiones pero si su actividad tanto en la Federación como en los clubes.
A las excursiones que se organizan ya no acuden los montañeros como antes. Es un fenómeno que lo volverá a vivir el pueblo vasco a la muerte del General Franco, tras cuarenta años de dictadura.
En el año 1931 deja de publicarse la revista "Pyrenaica" que venía publicándose desde 1926. Habían visto la luz 16 números, los 15 primeros trimestrales y el último como anuario. También en este año de 1931 y debido a los enfrentamientos personales entre dirigentes en Bizkaia, es el propio Antxon Bandres, verdadero artífice de la creación de la Federación Vasca de Alpinismo, quien propone en una Asamblea sumamente movida de las sociedades de Bizkaia, la disolución de la Delegación Vizcaina, repartiendo el capital existente entre las diversas entidades de beneficencia.
Con estas desapariciones y hasta que en 1935 se vuelve a reeditar la revista Pyrenaica, entramos en un período ciertamente oscuro sobre la información a cerca del desarrollo de la actividad montañera.
De todas formas sí se conoce que en Galdakao existe un grupo de jóvenes que se denomina Eguzki lndarra (fuerza del sol) y en Usansolo otro de las mismas características denominado Euzkadigaitik (por Euskadi) con un carácter más político (posiblemente provenientes de Euzko Mendigoizale Batza) que mantienen la antorcha de la actividad montañera.
La revista "Pyrenaica" reaparece en 1935 dando cuenta del estado en que se encuentra el montañismo vasco; de los cuatro comités regionales existentes sólo quedaba el guipuzcoano.
En ese año todavía aparece la Sociedad Deportiva Elexalde, pero 1936 y la guerra la hacen desaparecer como a otras muchas. La situación es reveladora, los clubes federados han descendido de 86 a 27, quedando en Bizkaia, de los 48 existentes, solamente 5.
Al final de la contienda civil no fue fácil reunir de nuevo a los montañeros, ya que las sociedades tenían una única forma de seguir existiendo, afiliarse a la nueva Federación Española de Montañismo, creada en 1949 de la que dependían las delegaciones regionales. Otras, reticentes a las nuevas normas, se disolvieron.
En estos años algunos jóvenes de Galdakao se venían reuniendo para jugar partidos de fútbol. Tan precaria era su situación que la indumentaria para jugar, según Perico Gurtubay, se la prestaban sus contrincantes. Al término de uno de estos partidos, durante la temporada 1939-1940, y tras ganar al Padura, surgió por parte de un grupo ya federado, la idea de organizarse como Club Deportivo Galdácano.
En realidad, como cuentan quienes lo vivieron, era una forma de resucitar la asociación "Club Elexalde", y el cambio de nombre es debido simplemente a la nueva situación política, que no permitía términos euskéricos.
Muchos de los entonces vinculados al Club Deportivo Galdácano, habían participado en el Club Elexalde, anterior a la guerra y en ellos seguía presente el germen de la afición al monte. Así, hacia 1942 varios componentes del club, Cesáreo Olabarrieta, Ignacio Ealo "Tanque", José Luis Zelaia, Kepa Yurrebaso, Perico Gurtubay, Arturo Maza, Josu Altuna, Victoriano Zelaia " Katxo " y un buen número de amigos, se reunieron en la "tasca" de Totorica y propusieron a la directiva, presidida por Braulio Ibarretxe y con Victor Legorburu como secretario, la creación de una seeción de montaña, haciéndose cargo el club de la entrega de premios para las actividades. La respuesta fue negativa, aduciendo que era un gasto sin ningún beneficio.